Pura e inolvidable, la otra Pekín y sus secretos te esperan, invitándote a vivir experiencias inesperadas
Pekín es una ciudad olímpica única, ya que hasta ahora es la única que ha albergado tanto los Juegos de Verano como los de Invierno. Esta distinción añade un atractivo especial a la idea de correr un maratón aquí. Y lo mejor de todo es que ¡incluso puedes correr un maratón en la Gran Muralla! Aunque las fechas pueden variar, no dudes en contactarnos para más información.
La vieja Pekín fue originalmente una ciudad amurallada, rodeada por cuatro murallas y nueve puertas. Esta zona, conocida como la Ciudad Tártara, formaba el núcleo de la ciudad interior. Hacia el sur, la ciudad amurallada se amplió, aunque la extensión nunca llegó a completarse del todo. Además de las murallas y las puertas, las defensas de la ciudad incluían torres vigias y torres de esquina.
Con el tiempo, especialmente tras el colapso de la dinastía Qing, las murallas empezaron a ser derribadas. Este proceso culminó con su completa demolición después del establecimiento de la República Popular China. No obstante, hoy en día todavía se conserva un tramo de muralla, junto con una torre de esquina y algunas puertas, que sirven como recordatorio del pasado histórico de la ciudad.
Los pekineses llevan siglos practicando el patinaje sobre hielo. Entre los muchos inventos de China, algunos incluso afirman que el hockey se originó aquí. A partir del siglo XVII, la corte imperial celebraba juegos sobre hielo en los lagos centrales cada mes de diciembre.
Patinar sobre hielo natural ha sido durante mucho tiempo una afición muy apreciada en el norte de China, disfrutada tanto por niños como por adultos. Aunque ya no es posible jugar al hockey en la Ciudad Imperial, el patinaje sobre hielo sigue siendo una actividad invernal muy popular en Pekín.
Además del Pato Laqueado, Pekín ofrece una amplia variedad de platos, dulces y Bebidas, algunos de ellos solo aptos para los más atrevidos. La cocina local pekinesa puede describirse como “contundente”, especialmente pensada para resistir los fríos inviernos de la ciudad. Piensa en baozi (bollos al vapor), fideos, youtiao (palitos de masa frita), gachas y cremosos yogures. Aunque la comida no es particularmente picante, algunos dirían que tiende a ser un poco aceitosa.
¿Te atreves a probar el tofu de cerebro? ¿Qué tal un guiso hecho con intestinos e hígado? ¿O quizá una reconfortante olla caliente de cordero? Si no, no te preocupes: la variedad de opciones es enorme y se adapta a todo tipo de gustos.
Siendo el segundo mercado de té más grande de China, esta zona cuenta con cientos de tiendas dedicadas al té chino. Es el destino ideal en Pekín para los amantes del té que deseen explorar y degustar una gran variedad de tés. Además del té, el mercado está repleto de utensilios y accesorios relacionados. Las actividades y exposiciones periódicas en torno al té lo convierten también en un animado centro de la cultura del té.
Si quieres experimentar la calidez y la esencia acogedora de la cultura del té en China, este es un excelente lugar para comenzar.
La Gran Muralla salvaje es lo que podríamos llamar la verdadera Gran Muralla. Para apreciar plenamente su escala y grandeza, la mejor forma es recorrerla en su estado natural, tomando, por supuesto, las precauciones necesarias.
Para los aficionados al senderismo en Pekín, hacer una caminata suele significar una sola cosa: escalar la Gran Muralla. Esto se debe a que las zonas que rodean Pekín muestran todas las características notables que la Muralla tiene para ofrecer.